Este año la visita al Abedular ha sido un poco tarde; el 10 de Noviembre los abedules ya casi no tenían hojas y no fue posible ver sus colores otoñales. De todas formas ha merecido la pena poder caminar por el bosque, todo lleno de chorreras debido a las últimas lluvias, el musgo era abundante y lucía su mejor verde, los acebos con sus hojas brillantes y la temperatura inmejorable. La chorrera de Mojonavalle empezaba a mostrar bravura. Un par de fotos pueden dar fe.
2 comentarios:
Esta muy bien!, si pinchas en las fotos sale la foto grande.
¡Qué sitio tan bonito!
Esto sí es colorido y no lo que hay en Cantoria.
La Tose
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